La maternidad es una experiencia muy particular, es única, polifacética, y esta es una realidad que se manifiesta de modo diferente en cada una de las madres.
Hay madres que actúan de diferentes modos, desde las que son especiales, cariñosas, hasta las estrictas, controladoras, y exigentes. Cada estilo de crianza representa unas características particulares que le son propias, y tienen también sus propios desafíos.
Te comparto cinco consejos clave para los diferentes tipos de crianza que las madres expresan:
- Sé auténtica:
Imitar a otras madres con el ánimo quizás de ser como ellas, no es una buena forma de actuación, básicamente porque a la larga, podrías terminar siendo una mala copia de esa otra persona. Está bien observar otros comportamientos que, como cualidades en la educación de los hijos, te pueden ayudar en la formación de los tuyos. Pero adapta esos aprendizajes a tu estilo, sin dejar de ser tú, porque al mantenerte fiel a ti misma, lo que has hecho es un genuino aprendizaje
- Practica la comunicación:
Para cualquier estilo de crianza, la comunicación resulta ser fundamental, porque permite mantener las puertas abiertas con tus hijos, cuestión que es clave para poder entender y comprender la realidad particular de estos. No importa cuál sea el estilo que uses para formar a tus hijos, permitirles a los hijos que se expresen, que piensen en voz alta y expresen sus dudas, preocupaciones e inquietudes es muy importante en el fortalecimiento de los lazos de confianza entre ellos, y tú.
- Encuentra un equilibrio:
El amor y la disciplina son fundamentales en la crianza de los hijos. De allí la importancia de que como madre amorosa ofrezcas apoyo, afecto a tus hijos, seas como ese pilar donde puedan sostenerse, pero también hay que destacar que como madres hay que establecer límites, y expectativas claras. Busca el equilibrio, ese que funcione de un modo eficaz para ti, y tus hijos
- Aprende y crece:
La vida es un aprendizaje continuo, dejar de aprender, es estancarse. Más aún, las madres, puesto que cada una en su estilo de crianza, pueden conocer formas que les permita maneras eficaces de formar a sus hijos. Por eso es importante mantenerse abierta a nuevas ideas, formas, estrategias que puedan ayudar y enriquecer su experiencia como madres.
- Sé compasiva contigo misma:
Ser madre es una tarea desafiante. No seas cruel contigo misma, en el afán de buscar ser “la mejor madre” en el sentido de querer alcanzar una perfección que no se da, entonces notarás que muchas cosas que haces en la formación de tus hijos, bajo esa perspectiva, podrían ser calificadas por ti como un error en tu estilo de crianza. Comprende que estás haciendo lo mejor que puedes con lo que tienes, con lo que eres. No significa esto que debas encogerte de hombros, y caer en el descuido, ni más faltaba, pero tampoco es irte al otro extremo en que todo lo juzgues como mal hecho.
Recuerda que no hay un enfoque «correcto» de la maternidad, sino que cada madre es única y valiosa en su propio camino.
HÉCTOR LEONARDO MORA
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